¿QUIÉNES SOMOS?
"Cristo nos liberó para que fuéramos realmente libres. Por eso, manténganse firmes y no se sometan de nuevo al yugo de la esclavitud” (Gal 5,1)
Somos una Sociedad Sacerdotal de vida apostólica de derecho sinodal, adherida a la Tradición Veterocatólica. Profesamos una fe depurada y concreta en la persona de Jesús como nuestro Único y suficiente Salvador; vamos más allá de cualquier Institución y por tanto, no pretendemos competir, ni mucho menos rivalizar, nuestra única meta es dar a conocer una conciencia centrada en el misterio de Dios que actúa en el ser humano.
Nuestra Sociedad está conformada por Sacerdotes, Diáconos y Hermanos incorporados por una Adhesión Oficial, reconociendo a Ignacio de Loyola como guía, acogiendo su espiritualidad.
La vida de un Ignaciano Veterocatólico tiene como eje central el discernimiento; es un buscador de las huellas de Jesucristo, por eso su vida cotidiana se convierte toda ella en "amar y servir".
La consciencia en Jesús constituye el primer factor del Carisma de la Sociedad Sacerdotal; somos cristianos Veterocatólicos que buscan la inclusión, como bien lo hizo el Maestro.
Creemos en Dios, más no, nos creemos Dios y por ello somos fieles a su Palabra cuando dijo: “Vayan, pues, a las gentes de todas las naciones, y háganlas mis discípulos.” (Mt. 28, 19ª).